Las Sarracenias son de las plantas más demandadas por los amantes de las Plantas Carnívoras. Sin duda, las Sarracenia son las Plantas Carnívoras más más ornamentales del planeta. Lucen erguidas y elegantes, con tonos espectaculares y aspecto engañosamente bello.
Y es que las Sarracenias, son unas máquinas de capturar insectos. De forma pasiva (ya que no son capaces de moverse como otras plantas carnívoras), se sirven de sus tonos y néctares para atraer y atrapar innumerables presas a lo largo de su vida.
Tipos de Sarracenias
En la naturaleza sólo existen 8 especies de Sarracenias, aunque en la actualidad hay innumerables híbridos que se han ido desarrollando para su cultivo.
Los 8 tipos de Sarracenia reconocidos son, por orden alfabético:
- Sarracenia Alata
- Sarracenia Flava
- Sarracenia Leucophylla
- Sarracenia Minor
- Sarracenia Oreophila
- Sarracenia Psitassina
- Sarracenia Purpurea
- Sarracenia Rubra
Cuidados de Sarracenias
- Ubicación: Exterior.
- Luz: Mucha luz, con exposición a sol directo.
- Humedad: Agradecen humedad alta.
- Temperatura: En la naturaleza viven entre 3º y 26º, aunque se pueden aclimatar a rangos más extremos.
- Sustrato: Sin minerales y que sea capaz de retener mucha humedad. Mezclas de turba rubia con componentes aireantes, como perlita, arena de cuarzo, etc.
- Riego: Mediante el sistema de bandeja: Situando la planta en un recipiente con agua permanentemente.
- Agua: Regar con agua muy pura, hasta 100 partículas por millón de minerales disueltos: Agua destilada, agua de lluvia, agua de osmosis o agua de aparatos de aire acondicionado.
- Abono: No abonar nunca.
- Reproducción: La forma más común y sencilla es mediante división de rizoma (separando la planta en varias divisiones desde sus raíces).
En ocasiones puedes ver que las Sarracenia producen hojas no carnívoras. Estas se se llaman Filoides, y están destinadas a cumplir la función de hacer la fotosíntesis como las hojas de cualquier otra planta. No te preocupes cuando las veas, dado que es completamente normal.